¿Fue a caso mi culpa ??, ¿ la mala suerte ?, ¿ sera el destino acaso, si tal cosa existe ?, ¿ o talvez sera la ineludible voluntad de los Dioses ?, mis preguntas comienzan a partir de una conjura de hechos que me ubicaron en el poder y la responsabilidad de ser el guardian universal de la botella atada con un cordon de zapatillas. Pero mejor explico (con narrativa anacronica)
Cuenta la historia de una vieja que se queja del agua que cae desde el aire acondicionado de nuestra oficina (el aire imprescindible en estas epocas de clima infernal/invernal (el mundo se volvio loco)), la onda es que se quejo , se quejo hasta que no se como terminamos instalando un complejo sistema de tubulacion que redirige la salida estandar del aire acondicionado a la entrada estandar de la botella.
Una vez, en una epoca , mas o menos al principio del 2008, en la empresa donde trabajo, deciden realzar una instalacion masiva en todas sus sucursales e instalaciones locales, sin percaterse de la anomalia q se avecinaba.
En un futuro post-apocaliptico, todos en la empresa mueren en un misterioso incendio
Todo esto lo termino escribiendo en un blog, mientras alguien intenta apagarme la maquina para evitar que la verdad sea rebelada
Antes de todo eso mande un curriculum para entrar a la empresa.
Despues de leer toda esa historia en el blog, empiezo a darme cuenta de mi ignorancia acerca de los limites entre la casualidad y la causalidad respecto de porque mi nuevo puesto de trabajo se encuentra convenientemente a 30 centimetros de la famosa botella, y a raiz de entonces, a cada rato me dicen "Robert, fijate la botella de agua" y de ahi me insipiro a inscribir ese articulo del blog
FIN???
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